
¿Ha sentido Ud. la frustración de no poder razonar un tema con sus seguidores en
Twitter,
Facebook o
LinkedIn porque el hilo de la comunicación termina siendo un sin fin de mensajes incoherentes y desordenados?
Eso ocurre porque, en esos servicios, el énfasis está puesto en la comunicación por mensajes, no en el razonamiento de ideas. De hecho, el único tipo de organización de los mensajes (
Tuits o Posts) es cronológico: el famoso
Timeline; lo cual no es suficiente para culminar con éxito un proceso de razonamiento y mucho menos almacenarlo de forma organizada para uso posterior.
Es por eso que la realidad tecnológica actual nos está imponiendo un nuevo reto: razonar colectivamente.
En este artículo describo una técnica para razonar colectivamente utilizando los medios digitales como plataforma de comunicación; a esta técnica la denomino
Mindcrowding.
Pensar y Razonar
Pensar y razonar son dos de las muchas acciones que puede realizar un ser humano. El pensamiento es la forma en la que se evidencia -o "sentimos"- parte de la cognitividad, mientras el razonamiento es un pensamiento guiado por una motivación que nos lleva a "sentir" la certeza de una cosa. Psicologicamente hablando, el
razonamiento es una forma de pensamiento auto regulado mientras el
pensamiento es una forma consiente de
inferir con un propósito especifico.
Para los fines de este artículo, el proceso de razonamiento individual podría fundamentarse en la
Teoría del Dialogo Interno que describe la habilidad de la mente para imaginar un dialogo interno entre dos o más participantes; es decir, podemos suponer que si existe un tema a razonar en la mente de un individuo y éste es capaz de imaginar un dialogo interior entre dos participantes "A" y "B" en el cual ambos participantes asienten o replican sobre sus inferencias, al final, y basándose en los conocimientos o creencias que posee el individuo, A y B irán formando un consenso hasta llegar a un grado de certeza en el cual ambos estén de acuerdo. Esa certeza pasará a ser parte de la
creencias de ese individuo hasta tanto no exista una nuevo dialogo interno que la cambie.
Un problema ocurre cuando el dialogo interno no puede avanzar porque existe disenso entre A y B debido a que las inferencias que esgrime uno u otro no pueden ser soportadas por lo conocimientos, experiencias o creencias que posee el individuo. En ese caso el individuo buscará terceras fuentes de conocimiento (p.e. documentos, imágenes, terceras opiniones, etc.) que puedan apoyar o refutar las inferencias que utilizan A y B; y esto ocurrirá así hasta encontrar un consenso entre A y B.
Aunque esta actividad mental es compatible con lo que experimentamos diariamente y es útil en un contexto local, puede ser altamente compleja cuando el contexto es global; es decir, dado que para razonar un problema en un contexto global es necesario un cúmulo de conocimientos que por lo general trascienden los de un individuo, posiblemente el dialogo entre A y B se vea truncado en forma permanente. Esto es un hecho notorio actualmente dado que los avances de las
Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) han permitido ampliar el contexto de discusión a un nivel global lo cual hace difícil razonar sobre situaciones de las que no tenemos información completa. Otro motivo relevante es la existencia cada vez más marcada de una
cultura de la inmediatez en la que está sumida gran parte de la civilización actual y que nos impulsa a buscar respuestas "inmediatas" a nuestros razonamientos.
Pensar y Razonar Colectivamente
Al igual que se puede razonar individualmente también se puede razonar colectivamente. Considere por un momento que una persona publica el siguiente mensaje en una red social: "Puede alguien darme ideas de como mejorar mis ventas de libros de astronomía?". Seguramente algunos de sus seguidores se interesarán en el tema y tratarán de razonar el problema desde su perspectiva y con los conocimientos y experiencias que posean; además, escribirán ideas o realizarán preguntas que contextualicen el problema. Por ejemplo algunas preguntas pertinentes podrían ser: ¿Tus ventas son al detal o al mayor? o ¿Dónde te encuentras?
En este punto cada uno de los seguidores interesados en el tema tratará de defender su razonamiento haciendo preguntas o emitiendo opiniones de tal forma que se desarrolla un proceso de razonamiento colectivo hasta dar con una alternativa que sea satisfactoria al menos para el vendedor de libros.
En el razonamiento colectivo el dialogo deja de ser interno y se convierte en externo de tal forma que los individuos intercambian los roles de A y de B hasta alcanzar un grado de certeza convenido entre todos.
La ventaja del razonamiento colectivo sobre el razonamiento individual es la de llegar a un consenso basado en conocimientos, experiencias o creencias distribuidas con la expectativa de obtener más celeridad, disminuir la complejidad y el costo de llegar a un estado de certeza sobre el tema razonado (uso el término "distribuido" porque el conocimiento, experiencia o creencia es este caso no se asume compartido por todos, sino que cada miembro del colectivo posee una parte del mismo). ¿La contrapartida? El reto de reunir un colectivo altamente motivado en resolver el asunto en cuestión, con más conocimientos en conjunto que uno solo de sus miembros y dispuesto a usar parte de su tiempo y recursos en esa actividad.
Razonar colectivamente no debe confundirse con actuar colectivamente. Aunque este último es un hecho común y notorio en la naturaleza (las manadas, los enjambres y las multitudes dan ejemplo diario de ese proceder cuando los individuos de una manada, enjambre o multitud esbozan un patrón de conducta similar ante un cambio del entorno, algunos sonidos u olores, o ante la vulnerabilidad de algún miembro) este comportamiento es aprendido, innato o imitado pero no razonado colectivamente; más bien, en estos casos el razonamiento colectivo no es un hecho común ni notorio.
En concreto, razonar colectivamente significa que un colectivo pueda utilizar la
arquitectura cognitiva de cada uno de sus miembros para razonar acerca de una hipótesis, conjetura o inquietud y crear en cada uno un estado de certeza similar al que hubiese alcanzado uno sólo de ellos si hubiera razonado el mismo asunto usando un dialogo interno teniendo disponible los mismos conocimientos, creencias y experiencias que la suma de los que poseen los miembros del colectivo. Esto requiere que los individuos de la colectividad "vivan", compartan y se expresen en un contexto referencial espacio-temporal compartido y que intercambien sus posiciones como participantes A y B hasta lograr el consenso sobre la certeza o falsedad de un razonamiento.
Pensar y Razonar en Contextos Referenciales Espacio-Temporales Digitales
El acto de inferir "
...puede enmarcarse en uno o varios contextos referenciales"; luego, siendo el pensamiento y razonamiento dos actividades mentales derivadas de la inferencia, puede considerarse entonces que también están sujetos al contexto referencial en el que se desarrolle. Nuestro contexto referencial por excelencia es el contexto espacio-temporal real; es decir, aquel que perciben nuestros sentidos y sobre el cual actuamos. En ese contexto percibimos (y
modelamos) espacialmente los objetos del mundo real en tres dimensiones y contabilizamos la dinámica de los objetos según un patrón temporal. Inferir entonces en el contexto referencial real significa llegar a certezas sobre el qué, cuándo, cómo, dónde y porqué ocurrieron u ocurrirán determinados hechos según las leyes, teorías o prácticas aceptadas.
No obstante, el referente real no es el único sobre el que podemos inferir. Los avances tecnológicos han permitido que nos expresemos en contextos referenciales digitales en los cuales las dimensión espacial no necesariamente es isomorfa a la del referente real y la dimensión temporal no está sincronizada con la real; ejemplo de ello son los
metaversos o los
mundos virtuales. En estos últimos, sus creadores, discrecionalmente, pueden modelar mundos tanto similares al real como parcial o totalmente distintos. El término digital alude al hecho que la operacionalidad de dicho referente está limitada por las leyes que regulan las señales discretas y cuantizadas (señales digitales), en términos de la teoría de la información. Entonces, inferir, y por ende pensar y razonar en contextos referenciales espacio-temporal digitales, implica argumentar o
hipotetizar asumiendo la existencia de un conjunto de leyes, teorías o practicas propias de ese contexto y en sintonía con las definidas por su creador.
Ontologicamente, en la mente de un individuo pueden
coexistir dos o más identidades, características y comportamientos ya sea en un referente espacio-tiempo real y/o en uno o más referentes espacios-tiempo digitales, donde incluso puede exhibir diferentes identidades (
Nick o
Avatar), características y comportamientos (p.e. como ocurre en
Second Life) en cada uno de ellos.
Desde un punto de vista colectivo, dos o más individuos podrán pensar o razonar en un referente espacio-temporal digital si cuentan con una técnica para realizar el razonamiento y una plataforma basada en TIC que permita la interacción entre los miembros del colectivo.
Mindcrowding
Mindcrowding, entonces, es una técnica para razonar colectivamente basado en la existencia de un contexto referencial espacio-temporal digital y soportado por una plataforma de TIC.
El hecho de que la técnica se aplique en un contexto referencial espacio-temporal digital no significa que excluya el razonamiento sobre asuntos relacionados al contexto real, más bien es lo suficientemente amplia como para incluirlo. La razón de utilizar un contexto referencial espacio-temporal digital es que se asume que los miembros del colectivo se encuentran geográfica y culturalmente dispersos por lo que es necesario una referencia espacio-temporal común de encuentro.
Mindcrowding + Colectivo = Mindcrowding Group
No tiene sentido hablar de
Mindcrowding si no existe un colectivo en el cual aplicar la técnica. Ese colectivo debe estar altamente motivado a razonar uno o más temas que se susciten en las mentes de una o más personas que demanden por los servicios del colectivo. También, deben poseer suficientes conocimientos o experiencias (o tener acceso a las fuentes) como para aportar opiniones válidas que permitan al resto del colectivo acercarse a un estado de certeza. Por último, deben estar dispuestos a disponer de parte de su tiempo y recursos en compartir sus conocimientos y experiencias a favor de la causa. A un colectivo con esas características lo llamaremos un
Mindcrowding Group.
Aplicando Mindcrowding
Aplicar la técnica de
Mindcrowding requiere de la existencia de un
Mindcrowding Group, tecnologías de soporte, al menos un tema a razonar y un método para su aplicación. Cada uno de estos elementos son tratados en el artículo "
Aplicando Mindcrowding" el cual, para mayor información, los invito a visitar.
Mindcrowding en las Organizaciones
La complejidad creciente de los temas económicos, sociales y de seguridad a nivel mundial y organizacional están apabullando las mentes de nuestros mejores pensadores y están dejando ver que el cúmulo de información y la impredecibilidad del entorno está más allá de los modelos matemáticos que lo idealizan y que cada vez son más complejos de manipular por la élite de mentes especializadas.
Quizás una solución para los Estados u organizaciones sea la de estimular el uso del razonamiento colectivo para dar respuesta a algunos de esos problemas en vez de minimizar o idealizar el entorno.
Hacer
Mindcrowding le podría permitir a las empresas contar con un nueva técnica que permita tanto a sus recursos humanos como a sus clientes procesar mucha más información que uno solo de ellos y seguramente disminuir los tiempos de respuesta y los costos asociados. Un ejemplo podría ser el uso de un colectivo formado por los habituales clientes de una organización a quienes se les solicitara razonar sobre como mejorar la logística de distribución de un producto para disminuir los costos de distribución, lo cual los beneficiaría al disminuir los costos y seguramente los precios del producto. O en el área de la Telemedicina, podría convocarse un colectivo para conformar una "junta médico/paciente itinerante" que sugiera los procedimientos apropiados para resolver casos de urgencia en pacientes ubicados en áreas de difícil acceso o con escasos recursos médico-asistenciales.
Mindcrowding Vs. Crowdsourcing
Crowdsourcing es una estrategia de trabajo a distancia (
telecommuting) de convocatoria abierta donde un grupo de personas interesadas se registra para realizar una o más tareas asociadas con algún
proceso de negocios a cambio de algún tipo de recompensa.
Mindcrowding, por otra parte, es una técnica para razonar colectivamente sobre temas de interés para todos los miembros de un
Mindcrowding Group. La diferencia más relevante entre ambos es que en el caso del
crowdsourcing existe un ente centralizador (por lo general una empresa) que solicita los servicios de los individuos y recopila el resultados de las tareas realizadas para luego integrarlas (o no) a resto del proceso de negocios, mientras en la técnica de
Mindcrowding los miembros del
Mindcrowding Group desarrollan una interacción muchos-a-muchos en la que cada uno razona individualmente sobre el tema en cuestión y luego publica y argumenta su posición hasta conseguir un consenso entre todos los participantes.
A pesar de que tanto en la estrategia
Crowdsourcing como en
Mindcrowding existe una aplicación que sirve como plataforma de interacción, en
Mindcrowidng no existen tareas por realizar ni un proceso de negocios asociado y el resultado es un conocimiento adquirido por los miembros del
Mindcrowding Group. También
, aunque no son conceptos similares, eventualmente podrían ser complementarios si los participantes de un
Crowdsourcing tuvieran que razonar colectivamente sobre un tema para llegar a una conclusión antes de ejecutar una tarea. De hecho, existen ejemplos de este tipo como el diseño del vehículo
Rally Fighter de la firma
Local Motors que combina una estrategia de
crowdsourcing con la resolución de problemas colectivamente.
Consideraciones sobre el Mindcrowding
Existen muchas razones para creer que es el momento de dar el salto hacia la colectivización del razonamiento. Aparte de la ya descrita evidente necesidad de operacionalizar el razonamiento colectivo, en los últimos años también han estado confluyendo diversos hechos que podrían hacer pensar en un cambio de paradigma social soportado por las TIC. Por ejemplo, temas de investigación como la
computación social, los
sistemas sociocomputacionales, la
computación humana,
las técnicas de tomas de decisiones colectivas, la
inteligencia colectiva, el concepto
Human Age, el
computador social, etc. son cimientos tanto tecnológicos, como psicológicos, sociológicos y organizacionales que podrían permitir dar fundamento científico a esta práctica social.
No obstante, por ser un tema reciente, existen consideraciones no resueltas que es importante tener en cuenta; por ejemplo y sin querer ser exhaustivo, surgen preguntas como las siguientes: ¿cómo lograr la persistencia del resultado de un proceso de razonamiento colectivo para que sirva como información a otros?, ¿se debe recompensar a los miembros de un colectivo que realicen
Mindcrowding?, ¿se puede mejorar la operacionalidad actual de las redes sociales para compartir ideas y conocimientos a fin de hacer
Mindcrowding?, ¿deben existir restricciones para pertenecer a un colectivo, o cualquier persona es bienvenida?, ¿cuándo se considera que se alcanzó a un grado de certeza suficiente como para aceptar o refutar un razonamiento?, ¿puede decidirse el grado de certeza por votación?, ¿influye el tamaño del colectivo en la celeridad y/o grado de certidumbre de sus conclusiones?, ¿De quién es la propiedad intelectual de una solución obtenida mediante
Mindcrowding?
Responder a estas y otras interrogantes del género es un asunto complejo que puede convertirse en tema de investigación formal; pero paradójicamente sería quizás más interesante razonarlas aplicando
Mindcrowding por lo que las dejaré abiertas para aquellos interesados en darles respuesta y a la vez aprovecho para animarlos a que conformen un colectivo, apliquen
Mindcrowding, y razonen sobre ellas.
Formar para el Mindcrowding
Al igual que el razonamiento individual es aprendido o incentivado en la formación académica y profesional de los individuos, también el razonamiento colectivo debería ser fomentado en los diferentes niveles de escolaridad con la finalidad de hacerlo parte de nuestra vida cotidiana. Posiblemente las universidades, apoyadas por las empresas y Estados, puedan destinar recursos para comenzar un camino de investigación que siente las bases teórico-prácticas que permitan definir el perfil de las personas que se convertirán en un futuro en un miembro de algún
Mindcrowding Group. Aunque razonar sobre temas complejos requiere mentes adultas y entrenadas que conozcan el tema a tratar no me sorprendería que sean las mentes de los niños y jóvenes las más propensas a asumir estos cambios. Posiblemente diseñar juegos educativos en los que las soluciones sean tomadas por el colectivo formado por los jugadores podría ser un buen comienzo para enseñarles la técnica.
Mindcrowding en el Estado
Mindcrowding no es útil solamente en las organizaciones empresariales. Las democracias representativas como forma de gobierno también se están viendo vulneradas por la incapacidad de dar respuesta oportuna a las necesidades de los ciudadanos. Actualmente, las decisiones de unos pocos no satisfacen a las mayorías porque la cultura de la inmediatez en la cual vivimos las hace obsoletas, ineficaces o extemporaneas.
Las Tecnologías de Información y Comunicación permiten que las colectividades posean la información necesaria y a tiempo para poder organizarse y tomar decisiones de forma independiente de las decisiones tomadas por sus representantes electos. Es así que la institucionalidad de los gobiernos tiende a caer en desuso simplemente porque los ciudadanos encuentran soluciones más efectivas y rápidas que las burocracias gubernamentales. Un ejemplo de ello es la búsqueda de consenso social en cuanto a un cambio de sistema de gobierno lograda por los ciudadanos en la llamada
Primavera Árabe que cambió el panorama político de toda una región del mundo en apenas meses o el reciente resultado en las elecciones italianas donde una colectividad pudo
organizarse a través de las tecnologías de Información y Comunicación para cambiar el mapa político de ese país.
Aplicar
Mindcrowding en la estructura social de un Estado podría permitir que se aligere la carga de decisiones de las instituciones gubernamentales y darle celeridad a los procesos que demandan esas colectividades.
Mindcrowdness
Al igual que el término
e-readiness se refiere a una métrica que mide cuán dispuestos o preparados están los habitantes de un país para utilizar las TIC en el mejoramiento de su condición económica y su bienestar social, así mismo el
Mindcrowdness mide cuan dispuesto o preparados están los miembros de un colectivo para razonar colectivamente; y posiblemente pudiera extenderse el término para indicar en que cuantía una organización o Estado está aplicando
Mindcrowding. Por ser una métrica es necesario definir un índice que la mida, no obstante creo que aún es prematuro aventurarse en ese aspecto y quedará como una tarea pendiente para los investigadores.
El Futuro del Mindcrowding y el Mindcrowdness
Como siempre, predecir el futuro es algo arriesgado; pero es un hecho que las necesidades de los usuarios son el motor del progreso tecnológico y actualmente estamos ante la necesidad de mejorar los procesos de razonamiento colectivo que se están comenzando a dar en las redes sociales. La técnica de
Mindcrowding podría ser un primer paso para desarrollar tecnología que nos permita hacerlo de una forma más organizada y coherente.
En un futuro no lejano seguramente veremos aplicaciones (o quizás
plug-ins para los servicios de redes sociales) que nos permitan
conformar uno o más
Mindcrowding Groups para razonar colectivamente temas complejos tanto de interés nacional e internacional, como temas cotidianos -aunque no menos importantes- como, digamos, ayudar al preocupado vendedor de nuestro ejemplo a mejorar las ventas de libros de astronomía. Ah!...y estaremos pendientes de cuál organización y cuál Estado puntearán el
Ranking de
Mindcrowdness.
e-Saludos,
Ricardo